Dos Capitalismos en el siglo XX: los «Treinta Gloriosos» y la deriva neoliberal

Después de un considerable parón en nuestro blog en este mes de enero, que necesitábamos para masticar y digerir los resultados electorales y los acontecimientos que han llegado con el nuevo año, volvemos por nuestros antiguos fueros para tratar de aportar algo en relación a ciertos aspectos de la política y la economía que estructuran nuestro presente, pero que tienen su base, como no puede ser de otra manera, en nuestro pasado.

Y es que en demasiadas ocasiones, tendemos a analizar nuestra realidad y orientar nuestros pasos sin mirar las huellas que dejamos atrás en el camino (a menudo con la colaboración del “establishment” que a veces saca réditos de borrar el pasado), y que, además de ayudarnos a explicar el presente y elegir nuevos senderos, nos ayudan a no tropezar con antiguos adoquines en nuestra nueva andadura.

El artículo pretende servir de introducción para una serie en la que iremos comparando la evolución de diferentes variables, como el crecimiento económico, la estabilidad financiera o la desigualdad, en diferentes periodos de nuestra historia reciente, con el fin de sacar algunas conclusiones y refutar algunas teorías que hoy se consideran doctrina.

Hoy nos centraremos en diferenciar dos etapas que, especialmente en política económica y social, se suelen observar como antagónicas, aunque ambas enmarcadas en el contexto capitalista. Hablamos de los conocidos como “Treinta Gloriosos” o “Edad de Oro del capitalismo”, que abarca desde finales de la SGM hasta mediados de los años 70, y el periodo que llegó a continuación al mundo anglosajón (entendido en este caso como EEUU y Reino Unido) y que se extendió por Europa Occidental desde los 70 hasta la actualidad. Esta etapa se conoce como neoliberalismo y supuso un retorno a los postulados de libre mercado que dominaban el mundo a principios del siglo XX.

Así que, de alguna manera, en el mundo occidental se han dado durante el S. XX dos tipos de capitalismo. Además, podemos decir, de manera general, que el siglo pasado es capicúa en lo que a ideología económica dominante se refiere, en el sentido de que empezó con la hegemonía de las teorías de libre mercado que murieron con los efectos de las dos Guerras Mundiales y el llamado “crack” del 29, a lo que siguió la época guiada por las teorías económicas cuyo máximo representante fue Jhon Maynard Keynes, en el marco del New Deal estadounidense de Roosevelt y los acuerdos de Bretton Woods. Finalmente, desde mediados de los 70 hasta hoy mismo, hemos vivido el retorno del liberalismo en una variante más desarrollada conocida popularmente como neoliberalismo, cuyo sostén teórico/ideológico se fundamenta en las ideas del premio Nobel de Economía Milton Friedman.

Vamos a tratar en este artículo de definir brevemente algunas de las características principales de ambos periodos, sobre todo en lo que a política económica se refiere.

  • Los Treinta Gloriosos: Keynesianismo

 Con la crisis de 1929, que supuso una depresión económica solo comparable en la historia reciente a la que hemos vivido en 2007, comenzó una nueva forma de entender la política económica que tuvo su origen en EEUU,  con la llegada de Roosevelt al poder y la entrada en escena de economistas como Keynes. Tras la Segunda Guerra Mundial, Bretton Woods sentaría las bases comerciales y financieras entre las potencias industriales más desarrolladas hasta el final del acuerdo en 1971. Durante el periodo 1945-1973 la política económica y social en los países industriales se caracterizó por:

– Un nuevo papel del Estado: Se entiende el intervencionismo estatal como algo fundamental para regular la economía, a través del control de la política monetaria y fiscal y la regulación y control de los mercados financieros. Este periodo fue testigo del nacimiento a nivel práctico de la socialdemocracia y la creación de lo que hoy entendemos como Estado de Bienestar. Las ideas de Keynes, que basan el éxito de la economía en la existencia de una alta demanda agregada favorecieron las inversiones públicas en sectores estratégicos (que afectó positivamente al empleo) y la necesidad de aumentar el poder adquisitivo de la mayoría social para mantener el consumo en niveles altos.

– Regulación de los mercados financieros: tras el desastre del 29, caracterizado por la vorágine especulativa de Wall Street y las prácticas fraudulentas de muchos Bancos de Inversión, el Estado entró de lleno a regular el sistema financiero y a reducir las inversiones especulativas, a la vez que controlaba el riesgo del sistema. La ley Glass-Steagal en EEUU, que separó Banca tradicional y Banca de Inversión, es el mayor exponente de esta nueva corriente.

– Auge de la negociación colectiva: a través de diversos acuerdos, se otorga mayor importancia a los sindicatos, lo que supuso una mejora sustancial de los derechos laborales.

– Política fiscal: Periodo de aplicación de los impuestos progresivos y mayores tasas impositivas a las rentas más altas: Gráfica sobre las tasas impositivas a las rentas más altas de Thomas Piketty

– Proteccionismo: época de mayores restricciones a los flujos comerciales y protección de la industria nacional, en algunos países el proceso fue acompañado de la nacionalización de sectores enteros (como el carbón, gas, electricidad y ferrocarril en Reino Unido y Francia).

– Tipos de cambio fijos: que se instauraron con los acuerdos de Bretton Woods y ligados al dólar, influyeron en la existencia mayores tensiones inflacionarias en diferentes países.

No todos los rasgos anteriores se dieron de la misma manera en todos los lugares, sin embargo, todos ellas fueron aplicadas, en mayor o menor medida en las naciones desarrolladas del mundo occidental y en otras países avanzados, como Japón.

  • Neoliberalismo: Milton Friedman

 Muchos economistas neoliberales justifican el cambio de tendencia que se inició a mediados de los setenta en el supuesto fracaso de las ideas keynesianas y en aquello de “hemos vivido por encima de nuestras posibilidades” cuestionando que el Estado de Bienestar sea viable económicamente.

Yo me alineo más con aquellos que buscan la explicación del cambio de tendencia en otros factores, como el paso de la balanza comercial de EEUU de excedentaria a deficitaria (que se produjo por primera vez en todo el S. XX en 1971) y que llevó a romper Bretton Woods, el temor (que hoy en día es casi enfermizo) a la inflación o el miedo estadounidense al proceso de convergencia económica que acercaba a los países europeos al poder financiero de EEUU, todo ello con la Guerra de Vietnam y sus catastróficas consecuencias (también financieras) como marco.

En cualquier caso, la llegada del neoliberalismo llevó aparejada un cambio absoluto de tendencia en el pensamiento social y económico precedente. Se demonizó y atacó la intervención del Estado en la economía (aunque el intervencionismo no acabó, más bien cambió de signo), se eliminaron los controles y regulaciones en los mercados financieros, se destruyó la fuerza sindical, la política fiscal se reorientó para favorecer a las rentas altas, se produjo la apertura total de los mercados y el libre movimiento de capitales, etc.

No vamos a desarrollar mucho esta parte ya que hemos hablado mucho del neoliberalismo y de hecho lo tratamos de explicar en un artículo anterior.

Lo que hay que entender, yo creo, es que vivimos bajo la influencia de una doctrina socioeconómica que hace pensar en muchas ocasiones que no existen otras opciones, que nunca se aplicaron otras formas de entender la economía. Hemos vivido a lo largo de los últimos treinta años, un desplazamiento hacia la derecha del pensamiento político y económico, no tanto porque los partidos conservadores sean más de derechas (que en algunos casos también), sino porque la socialdemocracia occidental que llegó, por supuesto, con permiso del poder económico y que ayudó a crear el Estado de Bienestar o a aplicar los impuestos progresivos, se ha vendido, en mayor o menor medida, a la ideología neoliberal (con contadas excepciones). Desde Tony Blair a Felipe González, pasando por Schroder. Esto posibilita el auge de un sistema que convierte incluso a la socialdemocracia capitalista anterior, la de los Treinta Gloriosos, en radicalismos comunistas.

Pues bien, utilizando estas dos etapas como referencia y estudiando distintas variables, vamos a intentar mostrar en posteriores artículos que las afirmaciones que hoy la doctrina ortodoxa vende como incuestionables, son como mínimo muy dudosas, cuando no falsas a la luz de los datos.

Saludos.

Lo que no te cuentan….y lo que cuenta

El domingo toca votar. Este domingo toca saber como vamos a digerir todos los cambios que, para bien o para mal, se han producido en nuestro país.

Tal vez, como dicen muchos, al final nuestro voto importa poco. Sin embargo, seguro que el resultado de estas elecciones servirá para calibrar la clase de sociedad que somos, lo que hemos aprendido en los últimos años y como deseamos encarar nuestra propia realidad.

Por todo ello, creo que es importante reseñar ciertos temas que han pasado prácticamente inadvertidos en los debates, las propuestas y los programas de los candidatos, y que van a marcar nuestro futuro más allá de lo que suceda el 20D.

También quiero en este artículo preelectoral hacer balance, echar la vista atrás y valorar, dentro de toda la marea de sucesos buenos y malos de los que hemos sido testigos en estos cuatro años, lo que para mi cuenta. Separar el grano de la paja y ver desde que trampolín vamos a coger impulso para afrontar los siguientes cuatro años.

  • Lo que no te cuentan

 Debates, tertulias, entrevistas, propuestas, medidas, presupuestos…….Lo hemos visto y oido todo en la campaña preelectoral. Sabemos más o menos lo que nos ofrece cada partido, pasado por el filtro de nuestra ideología, de unos medios de comunicación partidistas y de las promesas y medias verdades de los políticos de turno.

Pasemos pues por encima de los colores en este arcoiris ideológico en el que se ha convertido la política en nuestro país, vayamos más allá de los rojos, los azules, los naranjas, los morados o los verdes. Todos ellos se han dedicado a hablar de la política interna, de temas fundamentales que preocupan a los españoles como el paro, la corrupción o los impuestos. Todos ellos han enunciado propuestas para, a su modo de ver, mejorar la situación de los españoles.

No obstante, no hemos oido en los debates discutir sobre dos espadas de Damocles que penden sobre el cuello patrio y que subordinan y condicionan las promesas para convertirlas en polvo. Hablamos de la Troika y hablamos de un futuro acuerdo de libre comercio, el TTIP. Vayamos por partes.

Utilizo la Troika no como se suele utilizar en el sentido de señalar, para ponerle el rostro de trajeados hombres de negro con una sonrisa sádica y los ojos inyectados en sangre. Con la Troika me refiero más bien a esa corriente que se extiende por Europa, que se aceleró en época de crisis y a la que de hecho ésta sirvió como justificación. Esa tendencia cada vez mayor a aumentar la desigualdad, a precarizar el empleo, a generalizar los minijobs, a privatizar hasta el sol, a imponer la austeridad y recortar el estado de bienestar. Aires neoliberales con aroma norteamericano obsesionados con competir por abajo con países emergentes, destruyendo a su paso todo aquello que tanto costó construir. Nuestra dependencia como país de la UE y parte del euro es absoluta, nuestro estatus como país del sur nos encadena a un futuro cada vez más sombrío junto a otros como Grecia, Italia o Portugal.

Por eso, yo el domingo votaré lucha, votaré a aquellos partidos que hayan mostrado su intención de plantar cara, su pretensión de recuperar al menos parte de nuestra soberanía nacional perdida. Y no lo haré por una cuestión de honor, lo haré porque no veo otra salida.

grecia

Manifestación en Plaza Siyntagma

Habrá quien diga que eso nos llevará a un final a la griega. yo le respondo que Grecia acabó así en parte por nuestra cobardía, unido al poco poder que tiene en Europa. Pero la lucha de Grecia también es la nuestra, cuando fracasaron, fracasó también España. Nuestro peso económico en la unión monetaria es mucho mayor, y, unidos con otros Estados del sur podemos sin duda hacer fuerza para construir un verdadero propósito común, más democrático, más justo y más solidario. El proyecto del euro podía seguir adelante sin Grecia (de ahí el chantaje al que le sometieron), pero no puede hacerlo sin España o Italia.

Repito, no es honor ni orgullo, es mi propio pragmatismo y sentido común el que me transmite que no hay más salidas, a no ser que queramos seguir atrapados en esta trampa de endeudamiento que nos condena indefectiblemente a destinar lo que producimos para pagar más deudas recortando derechos, en un bucle sin sentido  ni final.

Una amenaza si cabe mayor para el sueño europeo se esconde tras las siglas TTIP. Para darle un toque cinematográfico diremos que el TTIP es “un tratado para gobernarlos a todos, un tratado de libre comercio para encontrarlos, un tratado para atraerlos a todos y atarlos en las tinieblas”.

Suena cómico o exagerado, pero no lo es. Este tratado supone la materialización de los sueños neoliberales, la entrada de EEUU (uno de los países desarrollados más desiguales y socialmente más injustos) en Europa de forma definitiva e irreversible, la rendición total y absoluta de la soberanía europea y de la democracia a las multinacionales.

TTIP

Manifestación anti TTIP en Londres

Suena exagerado, pero cualquiera que consulte las claúsulas que incluye el tratado, puede comprobar lo que trae consigo. Cualquiera puede simplemente echar la vista atrás y comprobar lo que ha supuesto para muchos países la firma de tratados de libre comercio con el gigante norteamericano. Incluso periodistas tan poco sospechosos de paranoias conspiranoicas y tan tolerantes con el establishment como Iñaki Gabilondo han alertado de los peligros de dicho acuerdo. La opacidad de las negociaciones y el silencio cómplice de los grandes medios de comunicación no hacen más que confirmar la amenaza. Multitudinarias manifestaciones en muchas capitales europeas no han tenido apenas eco mediático a través de televisiones y prensa escrita.

Por todo ello, el domingo votaré a aquellos partidos que públicamente y a través de su voto en parlamentos europeos manifiestan su rechazo a este tratado y lo que lleva implícito. Por el bien no sólo de mi país, sino, a mi entender, de todos los europeos.

  • Lo que cuenta

 Me considero hijo político de 15-M, en el sentido de que, como otros muchos, mi conciencia social y mi necesidad por entender el mundo que me rodea, incluyendo los intereses que lo mueven y las bases que lo sustentan, nació (o explotó) a través de un sentimiento de empatía y orgullo hacia aquellos que se amontonaron en las plazas de diferentes ciudades para reivindicar lo que es suyo por derecho. Para mi, eso es lo que cuenta.

Lloré de rabia desde un pueblo perdido a 4000 km de la Puerta del Sol viendo como, en un mundo donde ya todo parece estar escrito, donde la docilidad y la subordinación a un statu quo parece ser la única llave del “éxito” (o de la supervivencia), había gente que se reunía para pelear por verdades que hoy se consideran utopías, por certezas que hoy se disfrazan de sueños, por el sentido común que el mundo de hoy tacha de radicalismo.

ENPROF-JOAN-SUBIRATS-Foto-1-15m-sol-noche

Me considero hijo político del 15-M, y como tal reivindico su espíritu. No porque ese espíritu se limite a aquellos que se unieron al movimiento y abarrotaron las plazas, sino porque contiene, desde mi punto de vista, a todos aquellos que pelean con orgullo día a día. Para mi, eso es lo que cuenta.

Porque, como yo lo veo, el 15-M ni siquiera espera que todos salgan a la calle ni piensen lo mismo, sino que espera tan sólo representar a una mayoría que cree en la justicia social y que pelea contra corriente, que tiene fe en el de al lado y se apoya en él para sostenerse en una época en que las hostias vienen desde todos los sitios, en una época en que el sentido común se dirime en las plazas peleando en inferioridad de condiciones contra gigantes de la información que bombardean mentes tiernas y predispuestas a creer que el de a lado no te ayudará, que estamos solos en la contienda. Para mi, eso es lo que cuenta.

Es curioso reivindicar el 15-M cuando ni siquiera estuviste allí, cuando no lo viste de cerca ni retumbaron en tu oído los sonidos de la indignación. Pero donde no llegaron los sonidos se escucharon los ecos, su voz llegó tan lejos que incluso aquellos que ya no estábamos, nos estremecimos de orgullo y esperanza. Para mi, eso es lo que cuenta.

Y por eso, el domingo votaré a partidos que reivindican el 15-M como trampolín desde el que crecer y construir, incluso a pesar de que a veces cometan el error de hacerlo suyo, cuando es de todos. Les votaré a ellos porque no puedo votar a cada uno que se jugó su libertad parando un desahucio, porque no puedo echar una papeleta por cada abuelo que sostuvo con su pensión una familia, porque mi voto es a un partido y no a cada uno de los que se dejan la piel en mi país y fuera de él por demostrar que juntos y apoyándonos en el de al lado construimos eso que hoy nos han hecho llamar utopía.

Después de todo, como reivindicamos desde el blog hace tiempo “No todo está perdido, nunca lo ha estado” .

Que ustedes lo voten bien.

EL VOTANTE TeVe

Tercera y ultima entrada de nuestra mini sección  de ‘Perfiles Políticos’en “Apropósito de Smith”; de duración corta y cerrada durante este sprint final de la campaña electoral. (ver primera aquí y segunda acá)

En ella, de manera humorística, pretendemos acercarnos a 3 distintos perfiles de votantes españoles, que ejercerán, o no, el derecho a voto en estas elecciones generales del #20D.

Vaya por delante que ningún perfil político ha sufrido maltrato durante la escritura de este guion, todos los perfiles fueron escritos dentro de un circuito privado, elaborados y caricaturizados por un especialista (diferentes, que de presupuesto andábamos bien), y cualquier parecido o coincidencia con la realidad es pura casualidad…esto es una ficción que será, desgraciadamente, superada por la realidad.

En caso de sentirse aludido, por favor, no dudes en ponerte en contacto con nosotros, que siempre tenemos ganas de poder echarnos unas risas…, contigo, obviamente.

EL VOTANTE TeVe

El votante TeVe no te va a salvar.

Él, ella, son la máxima expresión de la mayoría patria. El votante Te Ve somxs todos, campeones oeoeoeoe, yo soy español español español.

El votante TeVe es la patria; y también el patriarcado, porque es machista aun sin saberlo, –a ver Bertin que yo de esto de cocinar, poco se.

El Votante TeVe es muy del patrimonio, porque su vida (y lo que con ella hace) solo depende de lo que paga en impuestos, –que son muchos muchos, y luego nada. Pero Dinamarca, esa gente si lo hace bien, verdad? Ah, que pagan? Pero no es lo mismo, hace mucho frío allí, también, no?

El votante TeVe quiere pagar muy pocos, porque el estado te roba, pero luego protesta si tiene que hacer cola en el metro o el médico. –Esto es tercermundista, no lo ve? Quien da la vez?

Este votante trabaja, normalmente demasiado y por un sueldo mínimo en la mayoría de los casos, pero para él, eso siempre es culpa de los inmigrantes. –Esto está lleno, ya hasta uno tiene miedo de salir a la calle, viste lo que le paso a la Mari?

Ve la tele, y mucho, aunque cuando le preguntan es de los que solo ve documentales de la 2 o el ciclismo para quedarse dormido, –bueno a veces pongo Sálvame, pero solo para tener algo que oír mientras cocino.

Se enfada con la corrupción, pero si puede, no te pone el IVA en la factura.-Ni pa’ ti ni pa’ mi, eh?

Ha construido toda su opinión gracias a los medios de comunicación, así que cada semana su intención de voto cambia, aunque al final siempre vota al #PPSOE; –no estamos para pruebas, macho, además mira Venezuela. Otro carajillo?

Ve el telediario mientras lee el marca o plancha las camisas+cocina +limpia+se desloma (porque el, pobre, llega cansadísimo a casa) y querría poder mandar un sms para comentarlo; – Jose, cállate! Vete a tu cuarto a jugar con la play!

12380312_490056184489139_683394546_nEl votante TeVe se dice apolítico, pero siempre acaba refiriéndose a la política para explicar problemas mayores: porque su equipo perdió (Villarato catalanista) o su cantante está en la cárcel (Pantoja presa política ya!). –Estos catalanes lo quieren todo, romper España y ganar la liga, ya esta bien!

Protesta mucho, pero solo en la carnicería o en el bar (otra vez) lo de salir  la calle, no sirve para nada, –si sirviese…ya vería usted.

Solo estuvo una vez en una manifestación y fue cuando su equipo descendió a segunda administrativamente o el Papa pasó por Madrid; a veces vamos a ver la luces de navidad también, no se crea usted.

El votante TeVe quizás no se acerque a votar, porque el mundo está loco y no quiere morir asesinado por un yihadista de esos que España está llena ahora que han llegado tantísimos refugiados terroristas; –lo dijo el ministro. Este año ya le he dicho a Manoli que nada de metro, por lo que pueda pasar.

El votante está harto de las dos Españas, porque no hay dos, solo unos que perdieron y no nos dejan pasar página. –Ya estamos hartos, por cierto, viste que buena estaba la novia del Javier?

No va a ver cine español porque solo habla de la guerra civil, prefiere superhéroes como Torrente o películas de los países vecinos, como  8 apellidos vascos o catalanes. Espera, esto es español? -Si pero no es lo mismo mira tron. Yo al cine voy a pasar un buen rato, que no quiero pensar.

El votante TeVe no tiene ningún problema con los homosexuales, fíjese, –a mí me gusta mucho Jorge Javier, pero lo de casarse ya es un pasarse. Y lo de adoptar niños, que va a ser? Estamos locos?

Y ellas?, al final, –algo habrá hecho, que es muy triste lo que pasa pero hay mucha que se pasa.

El votante TeVe no es racista ni somofobo de esos; –pero esto está muy mal, así no puede ser, aquí no caben todos y nos quitan el trabajo, primero nosotros, después ya parlarem!

El votante TeVe está explotado, pero –‘España ens roba’ y arriba España malditos bolivarianos!

Antes se iba de vacaciones, ahora no puede, pero para qué? Si en España se está como en ningún sitio, una vez fui a Portugal y ni punto de comparación, me sabe mal, pero parecíamos nosotros cuando Franco, pobrecitos de verdad.

El votante TeVe no es de aqui ni de allí, somos todxs, –si ya lo digo yo hijo, en el fondo todo es por algo, lo vi en la tele, lo dijo Gabilondo, salió en antena3, al final siempre pagamos los mismos, nada va a cambiar, España va mal pero el que no trabaja también es porque no quiere, mi Paco se desloma y luego el Mohamed va antes que el al médico, a mí nadie me ayuda con la compra, mucha cara mucha cara, mucha jeta es lo que hay, que guapo que es Rivera, pero más vale malo conocido que bueno por conocer, si están allí es por algo, sabrán mucho; tu – yo, que íbamos a hacer?


El autor de la ilustracion es Cristian Maiola, Para saber mas acerca de el,  CH Maiola, ilustrador y tatuador, tambien lo pueden encontrar y disfrutar en La Negra 2, ilustraciones;  tatuajes de cosecha propia y en el estudio HANABI-TATTOO de Rivas Vaciamadrid…

EL ANARCOCAPITALISTA

Segunda entrada de nuestra mini sección  de ‘Perfiles Políticos’en “Apropósito de Smith”; de duración corta y cerrada durante este sprint final de la campaña electoral. (ver primera aquí)

En ella, de manera humorística, pretendemos acercarnos a 3 distintos perfiles de votantes españoles, que ejercerán, o no, el derecho a voto en estas elecciones generales del #20D.

Vaya por delante que ningún perfil político ha sufrido maltrato durante la escritura de este guion, todos los perfiles fueron escritos dentro de un circuito privado, elaborados y caricaturizados por un especialista (diferentes, que de presupuesto andábamos bien), y cualquier parecido o coincidencia con la realidad es pura casualidad…esto es una ficción que será, desgraciadamente, superada por la realidad.

En caso de sentirse aludido, por favor, no dudes en ponerte en contacto con nosotros, que siempre tenemos ganas de poder echarnos unas risas…, contigo, obviamente.

EL ANARCOCAPITALISTA

Descripción de un personaje político curioso que se observa a menudo en la sociedad española. Yo lo identifico como «el anarcocapitalista».

Individuo de clase media-alta, generalmente (aunque no necesariamente) con estudios universitarios. Especie que abunda especialmente en entornos favorables para su reproducción como facultades de Economía, ADE o Derecho.

Esta variedad de votante se caracteriza por su clasismo salvaje y su descarnado cinismo.

Hacen gala de una fingida imparcialidad política, situándose en una centralidad que les permite siempre mirar por encima del hombro, aupados por un ‘sentido común muy superior a la media de la masa social cerril e ignorante’. Desde ese egocentrismo reparten una ensalada de lecciones a todos los «radicales».

Adoran que la gente piense que son «nihilistas». Es un clarísimo votante actual de Ciudadanos y votante anterior del PP, pero critica a todos los partidos.

Hacen gala a su vez de un cínico descreimiento hacia la política y la raza humana, sin embargo adoran hablar de política y naturaleza humana.

A pesar de criticar a todos los partidos, sus críticas son mucho más feroces hacia el votante de izquierdas, que, según ellos, vive en un mundo feliz de piruletas y nubes de azúcar. Da absolutamente igual que tipo de izquierda defienda; si defiende el Estado de Bienestar y las prestaciones sociales, es un pobre imbécil, crédulo e ingenuo porque eso ya pasó, no hay café para todos etc; si defiende una política más progresista malo, para ellos todo lo situado a la izquierda del estado de bienestar es comunismo bolivariano.

A este individuo le encanta la caricaturización de perfiles políticos, se revela contra las etiquetas pero las coloca continua e indiscriminadamente.12388248_489386414556116_32164813_n

Son defensores claros de la monarquía y la nación española en su sentido más rancio y triunfalista (haciendo a menudo referencias a Colón y la España de los Austrias) por norma general inmovilistas y enamorados de la transición, hasta el punto de que cualquiera que la cuestione es porque vive atado al pasado y sediento de venganza comunista y sangre franquista.

Su idea del español de a pie es la descripción de un paleto, vago e ignorante. Según ellos, la mayoría de los españoles somos corruptos y evasores de impuestos (da igual si su entorno no demuestra esa teoría). Nuestra holgazanería y pereza es consecuencia en parte de un Estado de Bienestar demasiado grande y un sobreproteccionismo estatal. Su determinismo y su ligazón a las teorías positivistas es de libro, los axioma que utilizan son sencillos y simplistas.

Sus referentes culturales y políticos viajan desde Arturo Pérez Reverte hasta Winston Churchill.

También son defensores de la bandera constitucional como símbolo incuestionable de españolidad, reivindican el concepto de patria a menudo, pero a la hora de votar jamás piensan en el conjunto de los españoles (como decíamos anteriormente, la mayoría paletos y vagos) sino principalmente en su bolsillo. No conciben diversidad cultural posible dentro del Estado, de ahí que vivan obsesionados con los independentistas y el nacionalismo catalán y vasco.

Chocan irónicamente su defensa absoluta de los símbolos tradicionales, que convive con la defensa de una especie de anarco-capitalismo en lo social que no sabe de patrias ni banderas. Son individualistas, darwinistas sociales y defensores de la meritocracia sin tener en cuenta las condiciones de partida e ignorando la existencia de clases (para ellos todos somos clase media) y tiende a culpar al pobre de su pobreza, debido principalmente a que en la mayoría de los casos provienen de una posición social cómoda. Las manifestaciones y las luchas sociales son reuniones de perroflautas ociosos que tienen tiempo para salir a la calle porque no quieren trabajar.

Es la creación perfecta del neoliberalismo, el sueño húmedo de Tatcher y Reagan que moldearon los últimos 40 años.

En cuestiones de política exterior son claramente europeístas y defensores de alianza incondicional con los norteamericanos. No existe más democracia que el concepto occidental de ella. Occidente como centro desde el que civilizar el mundo.

Eso sí, son capaces de justificar alianzas económicas con Arabia Saudí a la vez que echan pestes de la “dictadura” venezolana (a la que sus votados venden armas).


El autor de la ilustracion es Cristian Maiola, Para saber mas acerca de el,  CH Maiola, ilustrador y tatuador, tambien lo pueden encontrar y disfrutar en La Negra 2, ilustraciones;  tatuajes de cosecha propia y en el estudio HANABI-TATTOO de Rivas Vaciamadrid…

EL ROJO NOSTÁLGICO

Inauguramos una mini sección en “Apropósito de Smith” de duración corta y cerrada durante este sprint final de la campaña electoral.

En ella, de manera humorística, pretendemos acercarnos a 3 distintos perfiles de votantes españoles, que ejercerán, o no, el derecho a voto en estas elecciones generales del #20D.

Vaya por delante que ningún perfil político ha sufrido maltrato durante la escritura de este guion, todos los perfiles fueron escritos dentro de un circuito privado, elaborados y caricaturizados por un especialista (diferentes, que de presupuesto andábamos bien), y cualquier parecido o coincidencia con la realidad es pura casualidad…esto es una ficción que será, desgraciadamente, superada por la realidad.

En caso de sentirse aludido, por favor, no dudes en ponerte en contacto con nosotros, que siempre tenemos ganas de poder echarnos unas risas…, contigo, obviamente.

EL ROJO NOSTÁLGICO

Este personaje político es el típico defensor de la llamada “dictadura del proletariado” en el sentido más estricto de…dictadura. Sólo entiende la clase obrera como aquella con ideología de izquierdas y cualquier cosa que ellos no fumen es el “opio del pueblo”.

En muchos casos, marxistas que no han leído a Marx en su vida. Sus referentes políticos son y serán los de siempre, desde Lenin hasta el Ché, pasando por Allende y Fidel (aunque a la mayoría quizás solo lo vio en póster)

Hacen a menudo gala de una cansina superioridad moral, reivindicando todas las luchas sociales como suyas y arrebatándoselas a aquellos que no piensen como ellos. Tendencia a juzgar a las personas de antemano en función de su ideología política generalmente en base a prejuicios, discurso preñado de respeto y tolerancia, pero muchas veces sectarios e intolerantes.

En muchas ocasiones este espécimen muestra una ligera tendencia a explicar toda la inmundicia humana por causa de la sociedad capitalista de consumo. Exime de toda responsabilidad al individuo y suele achacarlo todo al entorno y la desigualdad, a veces de forma ingenua.

Vive anclado a símbolos antiguos y anacrónicos y utilizan continuamente eslóganes como “No pasarán” y “hasta la victoria siempre”. Nadie se ha parado a preguntarse la victoria de quien.

Piensan en el perfil del español como votante del PP, católico, seguidor de Sálvame y Gran Hermano y aficionado fanático del fútbol, inculto y manipulado por los medios generalistas. En demasiadas ocasiones 12348499_489146381246786_262778847_ndesprecian la forma de vida de la clase obrera que dicen defender.

Su clasismo es “hipster”. Sólo apoya iniciativas políticas minoritarias, su escepticismo crece a medida que se une más gente. Son los típicos que auparon a Podemos y hoy le desprecian por “ser parte del sistema”. Su voto es el tradicional de IU, votará a Unidad Popular pensando que no es IU sino la verdadera coalición de izquierdas.

Siguen creyendo que el cambio es yo y es ya, no se plantean vías ni caminos alternativos o progresivos para alcanzar los fines, solo entienden la lucha anticapitalista desde fuera y se niegan a aceptar derrotas pasadas.

Demonización continúa de la iniciativa privada,  estatalización de toda la actividad productiva sin tener en cuenta el contexto internacional, tendente a menudo a construir escenarios y propuestas económicas utópicas que se generan casi exclusivamente tirando de gasto público.

Fijación obsesiva en temas intrascendentes o secundarios mucho más relacionados con temas ideológicos e identitarios que con verdaderas formas de lograr avances sociales colectivos.

En política exterior, todo lo que pasa en el mundo es culpa de EEUU y el imperialismo yankee.

Todo vale si lleva la palabra anti imperialista: La religión no mola, pero si son barbudos iraníes anti imperialistas entonces sí, Perón era nacionalcatolicismo, pero si es Kirchner y grita anti imperialismo…es una líder del futuro, y así todo.

Sólo son dictaduras las de derechas, las de izquierdas pueden llegar a justificarse en función de la injerencia exterior, el colonialismo y los intereses económicos.

Ver el anarcocapitalista
Ver el votante TeVe


El autor de la ilustracion es Cristian Maiola, Para saber mas acerca de el,  CH Maiola, ilustrador y tatuador, tambien lo pueden encontrar y disfrutar en La Negra 2, ilustraciones;  tatuajes de cosecha propia y en el estudio HANABI-TATTOO de Rivas Vaciamadrid…

 

 

‪#‎IvánAbsolución‬

Desde Aproposito de Smith nos sumamos a la petición de juicio justo (aunque lo correcto hubiese sido que no se tuviera que haber celebrado) para el ciudadano Iván Ramirez, injustamente acusado de agresión policial en el transcurso de una manifestación en defensa del derecho, constitucionalmente recogido, a una vivienda.

El lunes que viene juzgan a Iván Ramírez, activista de la PAH, por manifestarse contra los desahucios en la Cabalgata Indignada de 2011. Iba de los últimos, la policía tenía prisa para abrir las calles a la circulación y le empujaron. Iván les encaró. Le esposaron entre cuatro y se lo llevaron detenido acusado agresión policial.

Desde entonces, piden 1 año y 9 meses de cárcel para Iván, bajo falsa acusación por una agresión, que nunca cometió, durante la protesta pacífica «La Cabalgata Indignada» en diciembre de 2011.

Toda vez que fue violentamente reducido, fue conducido hasta un furgón donde sufrió malos tratos por parte de la policía, la cual le causó daños en una muñeca de la que tuvo que ser operado más tarde.

Así pues, 4 años después, el lunes 14 de diciembre, Iván será juzgado en la Audiencia Provincial de Madrid de una manera injusta y por unos hechos que no cometió.

Por todo ello os pedimos que os suméis a difundir este injusto caso y a pedir la absolución de este activista que ha sido víctima de abusos policiales.

No permitamos una condena tan absurda e injusta.

¡Iván Ramírez, absolución!

 

Y para todos aquellos que aun tenéis dudas acerca de cual es la realidad diaria en los cuerpos y fuerzas de seguridad del estado os dejamos dos links y una imagen, porque es hora de despertar y reconocer que tenemos una deuda con aquellos que llevan años peleando -y de veras enfrentando la violencia arbitraria e impune- activistas que nos representan atodxs, y porque es hora de entender que no habrá cambio sin limpieza entre aquellos que llevan años sirviendo de esbirros del sistema.

Informe Torturas en Espana

Mossos, un cuerpo policial manchado.

tortura

Fuente, Periódico Diagonal y  Coordinadora para la Prevención y Denuncia de la Tortura (CPDT)

 

 

4 dudas y un funeral

1. Por qué no atendemos a las causas para encontrar las soluciones?

  • Cuantas noticias ha habido desde los trágicos atentados en Paris, que tuvieran que ver con el hecho clave (e intencionadamente no muy editorializado en los mass media) de que los autores identificados son todos ciudadanos europeos?

Cuantas reflexiones y acciones han emprendido los gobiernos franceses y belga, por ejemplo, para empezar  a paliar un problema evidente de desequilibrio social, que empuja a los habitantes de los suburbios de ascendencia musulmana la delincuencia y/o el radicalismo.

El modelo liberal, que ha ido imponiendo la lógica económica mercantilista a todos los aspectos de nuestra vida en común, que ha devaluado las actuaciones del estado a la hora de corregir los desequilibrios educacionales, económicos etc. no ha demostrado ninguna capacidad de respuesta satisfactoria, y aun así, sigue siendo nuestro mantra de cada día.

Condenamos al ostracismo a enormes capas de nuestras sociedades, in-visibilizando realidades y atendiéndolas bien desde la lógica privatizadora de lo social y el individualismo justificador del estatus personal de cada uno (ver meritocracia), o desde la pura represión policial como elemento contenedor/controlador.

Ante simas sociales que contextualizan estallidos violentos, llámense quema de coches o actos infames de terrorismo, seguimos poniéndonos la venda en los ojos, y preferimos las respuestas de acción-represión-acción (precisamente la que busca cualquier acción terrorista) que se han demostrados fallidas siempre, en particular desde la impuesta ‘guerra contra el terror’ iniciada en 2001.

Así, después de haber arruinado Iraq, Afganistán, Libia, Siria… es el mundo un lugar más seguro? La seguridad sólo viene con la justicia, y esto incluye justicia en todas partes, también, por supuesto, en nuestros barrios.

2. Cuando dejaremos de regirnos por motivos económicos para elegir amigos y enemigos?

  • La hipocresía mata. Nuestra hipocresía, lo hace además doblemente, puesto que asesina cuando es utilizada como verdadero eje vertebrador de las políticas internacionales, y porque es la principal responsable del efecto boomerang de nuestras acciones.

Una semana después de los atentados de París, Arabia Saudí condenaba a muerte a un escritor de origen Palestino por ateo. Pero es nuestra dictadura amiga, la misma que ha pagado esfuerzos de guerra, la que ayudo a financiar y armar muyahidines en Afganistán cuando estos eran luchadores por la libertad frente al ‘imperialismo rojo’, la misma que ha amparado las guerras en Iraq.

La misma que preside la comisión de DD HH en la ONU… si, esa misma, la misma que prohíbe conducir, votar y ser mínimamente independientes a sus mujeres, la que condena a los blogueros críticos a penas de latigazos, la misma que expande, financia y sustenta la versión más rigorista del Islam, tan parecida a los ISIS de turno, y financia de manera más menos encubierta a grupos yihadistas radicales por todo el orbe.

Nuestros aliados entre el mundo musulmán son igual que aquellos que establecemos como enemigos, solo que de unos si obtenemos contrapartidas, de los otros aspiramos a hacerlo. Para ello no escatimamos en guerras, intervencionismos, bloqueos…

Exigimos, eso si, seguidismo ciego a nuestras políticas por parte de los medios, Quatares de turno como patrocinadores…todo aquello que ayude a vender una imagen tergiversada y que no anime a la reflexión sino al puro instinto; todo lo  que justifique nuestro continuo ‘fracaso’ militar pero asegure el triunfo económico (industria armamentística, petroleo, estados serviles…) de la doctrina del miedo.

3. Cuando serán el hombre y la mujer la medida de todas las cosas?

  • La dolorosa ecuación mal resuelta por tanto supuesto izquierdista de carnet, -como decíamos en Fotos con Tesis 4, la ilógica zurda-, ‘(…) Que cansinos y desesperantes son algunos discursos atrapados en lógicas pretéritas. Esas que entienden que todo aquel o aquello que se autodenomine anti yankee ya merece más crédito y amparo. Como si estuviéramos obligados a elegir entre mierda y mierda, y una oliera mejor que otra por el mero hecho de jugar al pseudo imperialismo’ que obliga a entender el mundo en blanco y negro tampoco ayuda en la búsqueda de soluciones en el panorama que se abre ante nosotros.

Asistir al endiosamiento de personajes del calado moral de Putin, o a la mera defensa de Assad como dirigente (he llegado a leer que en Siria había elecciones democráticas, valiente estupidez) amado por su pueblo que se lee en demasiado análisis auto-justificativos me resultan especialmente tristes.

Como si no se pudiese estar contra la injerencia yankee y europea y contra la dictadura sangrienta y opresora de Assad al mismo tiempo.

Un maniqueísmo oportunista y dañino, para nada progresista ni humanista, una pérdida de perspectiva que solo es comparable a la propaganda infecciosa del capital.

Mundo de buenos y malos, mundo sin grises. Mundo condenado.

4. Cuando actuaremos ante el drama humanitario y no contribuiremos a la conspiración?

  • Nunca he sido un partidario de la conspiración, porque creo que solo sirve como excusa ante el hecho innegable del papel fundamental que en el devenir histórico ha jugado la estupidez humana. Y esta ayuda a entender en demasiadas ocasiones las supuestas conspiraciones.

Pero me parece fundamental y necesario, seguir denunciando el uso torticero, interesado y cuasi conspiranoico-paranoide que se ha hecho del drama de los refugiados y los atentados de Paris. Porque ha sido vomitivo, dolorosamente inhumano, intencionadamente injusto.

Pretender unir ambos acontecimientos es mezquino, y dice mucho del que, asumiendo una supuesta superioridad moral, contribuye al discurso de la Europa de la libertad frente al oscurantismo, de la Europa de la prosperidad frente a la avalancha.

Porque este si es un discurso falso y conspiranoico.

Quizás esta duda final sirva como punto final, porque actúa de  auto-conclusión, porque cuando se leen y oyen determinados análisis con respecto al drama humanitario; estos solo se entienden desde la falta de análisis real de los problemas y la falta de voluntad por atajar las causas, desde la ausencia de empatía mínima por los semejantes, desde la lógica hipócrita del análisis economicista.

Desde el análisis ideológico y doctrinario del miedo.

Y Un Funeral

  • Dejamos que nos robaran la memoria primero y ahora, directamente la asesinan ante nuestros ojos, y la borran para el futuro. RIP.

Hace unos días una noticia contaba que google view, el popular programa de geolocalizacion/mapas de Google, había decidido borrar unas pintadas visibles sobre la superficie de la fachada de una empresa norteamericana en Asturias.

La empresa es Tenneco, multinacional del automóvil cuya planta en asturias atraviesa dificultades desde hace dos anos y sus trabajadores están en riesgo de despido.

Las pintadas se referían a este hecho y animaban a la lucha sindical. Una de las pancartas que también salían recogidas en las imágenes tomadas por Google, hacía mención a un directivo, este pidió su eliminación en Google View…la empresa elimino todo.

El gran hermano, el generador y controlador de lo que ves y haces; de lo que compras y deseas…,obviamente también decide lo que veras. Que esta bien y que esta mal, que permanecerá y que se borrara..nos están robando la memoria, y lo mejor es que el botón lo apretamos nosotrxs.

humanismo

 

 

Banderas, muros y sangre

Veo como las redes sociales se inundan de banderas francesas y, si bien lo entiendo como una muestra generosa de apoyo al pueblo francés, no puedo evitar pensar que:

ISIS mató a 40 personas en Líbano hace dos días, y no tuvimos banderas para ellos.
Boko Haram ha sido capaz de cargarse en Nigeria a más de 2000 personas en un día en enero de este año y no es que no tuviéramos banderas, es que no tuvimos casi ni noticias.
– Las banderas no explican la influencia que ha tenido y tiene occidente en la creación y mantenimiento de grupos terroristas como Al Qaeda o ISIS.
– Las banderas no explican que la política exterior de países occidentales ayuda a ahondar en los conflictos en Oriente Medio, en lugar de solucionarlos (Afganistán, Siria, Iraq…).
– Las banderas no explican que en España y otros países europeos seguimos apoyando y manteniendo relaciones con Gobiernos que directamente financian estos grupos terroristas, como Arabia Saudí, en base a intereses económicos.

Es necesario que entendamos el contexto para poder analizar la tragedia sin incurrir en las típicas simplezas que invitan a creer que 1200 millones de personas son nuestros enemigos cuyo objetivo es la conquista de Europa.
Necesitamos un contrapeso en la información a muchos medios y políticos racistas especialistas en fomentar el odio más sectario y xenófobo, alimentando con ello a los desgraciados que en nombre de Alá, Dios O Yahvé aun siguen derramando sangre de inocentes.
No convirtamos esto en una guerra contra el Islam, y si contra el terrorismo. No le demos el gusto a esta basura de seguir aupando en nuestros países a gobiernos que amparan a dictadores en el tercer mundo y recortan derechos y libertades en nombre de la seguridad nacional.

Esta gente, los fundamentalistas religiosos, son los mismos que obligan a cientos de miles de musulmanes a dejar su hogar y buscar refugio en otros países, en muchas ocasiones jugándose la vida en el viaje, y casi siempre siendo rechazados por muros cuando consiguen alcanzar la frontera de Europa. Todos estamos contra el terrorismo, pero no queremos saber nada de los que son las principales víctimas de él.

Me asquea ver  la bandera francesa de fondo en perfiles de personas que a la vez abogan por levantar más muros mientras llaman a las víctimas asesinos, tan sólo porque profesan una religión.

Tenemos la responsabilidad de informarnos para tratar de entender los diferentes poderes e intereses que configuran los conflictos en Oriente Medio. Si lo hacemos nos daremos cuenta de que el principal objetivo de ISIS no es Occidente (aunque pueda sonar frívolo cuando han pasado sólo dos días de la muerte de  al menos 128 personas en Francia), sino que son los Gobiernos de países árabes que ellos consideran infieles. Entenderemos que esa es la principal amenaza, en primer lugar para los propios musulmanes (el 90% de las víctimas de grupos terroristas islámicos son árabes o de religión musulmana), y en general para toda la humanidad.

Si estudiamos el contexto nos daremos cuenta de que Occidente nunca actúa allí donde realmente está el problema, y que países como Siria (y antes Iraq, y antes Afganistán) son el marco de una doble guerra, la que mantienen las diferentes vertientes y ramas religiosas que allí conviven, y la que libran Rusia y EEUU y sus respectivos aliados por el control de las materias primas y la adquisición de posiciones militares desde hace años. En medio está la población civil. Su muerte es un mal necesario.

Si tratamos de ver más allá, nos percataremos de que el terrorismo islámico no sólo no se combate en Occidente, sino que en ocasiones se fomenta, ya que supone la justificación perfecta sobre la cual las potencias mundiales contruyen su propio apoyo electoral. El enemigo perfecto para legitimar una sangrienta política exterior. Un terror apropiado para erigirse en el protector del rebaño asustado. Sin la amenaza del Islam, la mirada escrutadora de la población pasaría al enemigo interno, a cuestionarse y preguntarse si realmente nosotros (Occidente) somos los buenos, y ellos (el Islam) son los malos, o bien somos todos marionetas en  manos de unos poderes sin más nacionalidad, raza ni religión que el dinero, que se alimentan de la desigualdad económica y social, el odio sectario y el miedo.

Si el problema es que muchos países árabes siguen demasiado anclados a la religión y eso lastra la llegada de la democracia y el desarrollo social, y que deja los gobiernos árabes en manos de terroristas, sátrapas y tiranos ¿Por qué coño no se apoyó desde EEUU y Europa la esperanza que dibujaron las Primaveras Árabes allá por 2013?. Simplemente, porque no interesa.

Tenemos la obligación de indagar en todo esto para comprender que una mayoría amplísima de la población árabe siente el mismo rechazo por el terrorismo que nosotros mismos, especialmente porque es su sangre la que más se derrama.  Debemos razonar que la injerencia y el ataque que históricamente han perpetrado países como Rusia y EEUU  en Oriente Medio sólo favorece que la población se refugie en los radicales violentos para protegerse de ambiciones extranjeras.

Es la cultura y el razonamiento el mejor instrumento de integración, y el mejor arma contra el radicalismo. Si queremos contribuir al desarrollo del mundo árabe y el fracaso del terrorismo, debemos entender primero dicho mundo, su religión, su población, su territorio, sus luchas y su historia. Sólo así estableceremos ordenadamente el reparto de responsabilidades y podremos ser justos a la hora de juzgar a un pueblo que, al final no es, en absoluto, tan diferente a nosotros.

No son diferentes las víctimas de París, de las de Siria, de las de Líbano. Su sangre sigue siendo roja cuando empapa la tierra en las calles de Alepo, o las carreteras asfaltadas en las  inmediaciones de un estadio en París. Son víctimas de nuestro fracaso como especie.

masacre

Viñeta de Vergara para eldiario.es

Carta de un machista

Hará unos meses escasamente, estaba el hijo de unos amigos íntimos probándose el uniforme del colegio antes de empezar el curso escolar, los pantalones eran de un color oscuro, marrón, y la camiseta era blanca.

  • ⁃ La camiseta es bonita – comentó su padre.

Respondí de forma automática lo siguiente:

  • ⁃ Si, pero es un incordio para las madres ( refiriéndome a que el color blanco de la camiseta haría que ésta se ensuciara más fácilmente)

¡Para las madres! Corregí inmediatamente mi afirmación ante la mirada reprobadora de los que allí estaban presentes, y añadí “y para los padres claro”.  Sin embargo, ya estaba dicho…

Hasta hace no mucho, no me consideraba a mi mismo machista. Siempre he sido una persona que ha condenado y condena vehementemente la violencia de género, tachando a todo aquel que lo practica de “cobarde” o “escoria”. A esto cabe añadir que he defendido siempre la igualdad entre hombres y mujeres, sobre todo en el terreno laboral, que al final es el lugar donde todos aquellos que no nos consideramos machistas (aunque lo seamos) centramos el debate.

No obstante, soy machista, y mucho.

Como cualquier defecto y/o prejuicio, el primer paso para luchar contra él es reconocerlo. Diría más, como ocurre siempre, el primer paso es comprenderlo para luego reconocerlo.

Comprender que vivimos inmersos en una sociedad patriarcal que introduce una enorme cantidad de prejuicios de base que calan en nuestro cerebro. Una sociedad en la que el concepto de igualdad de género es erróneo, pues suele centrarse en el terreno laboral o jurídico en la mayoría de los casos, para dejar de lado el puramente social, que es la base de todo.

Comprender que el machismo no es sólo el maltrato físico o psicológico, que son tan sólo la punta del iceberg, sino que está en nuestro día a día, en la actitud que adoptamos hacia el sexo contrario, en nuestra idea del papel del hombre con respecto a la mujer, en nuestra confusión dolorosa de términos como feminismo e igualdad, en nuestro lenguaje cotidiano..

Lo comprendo y me arrepiento tremendamente.

Me arrepiento de los tiempos en que quise influir aunque fuera mínimamente en la forma de vestir de mi pareja, de los días en los que fui posesivo y controlador, en los que mi inseguridad y mi estupidez me llevaron a creer en mi papel de macho alfa, en mi personaje del “protector”.

Me arrepiento de la forma en la que muchas veces miro a las mujeres y de no entender su sexualidad, de mi lenguaje cotidiano jalonado de tópicos e imbecilidades y de la contribución que, aunque fuera indirectamente, hice y hago con ello a seguir manteniendo una sociedad en la que SON ASESINADAS (no “MUEREN” como se empeñan en titular los medios) mujeres día si, día también.

Lo comprendo, me arrepiento y prometo luchar.

Prometo luchar, en primer lugar, contra mi mismo, contra prejuicios y estereotipos como los que se ejemplifican al principio del artículo, que están introducidos desde hace largo tiempo en mi subconsciente y que requieren, por tanto, un ejercicio individual continuo de comprensión de la desigualdad de género, de la estructura de la sociedad en la que se enmarca dicha desigualdad y de los sedimentos que ésta ha dejado y deja en mi raciocinio y mi criterio.

Prometo luchar por entender la utilización que, de forma peyorativa e intencionada, se hace del término feminismo y la tendencia a añadirle sufijos como “radical” o “nazi”, conflicto de naturaleza semántica pero con un trasfondo eminentemente social. Feminismo no es lo contrario de machismo. Feminismo es lucha por alcanzar derechos sociales, machismo es la vulneración de estos derechos. El feminismo lucha por alcanzar la igualdad, la igualdad no es radical, no es un extremo, es el punto medio, el de equilibrio.

Feminismo es la lucha por los derechos de la mujer en la sociedad, y gracias a ella avanzamos todos, confundirlo deliberadamente con radicalismos siempre tiene como fin la pervivencia del sistema patriarcal. Nadie niega la existencia de las denuncias falsas de maltrato o de las posibles desventajas en el sistema jurídico que puedan existir contra el hombre en la solución de conflictos de carácter matrimonial, pero esto no tiene absolutamente nada que ver con el feminismo, y querer responsabilizarle de ello es manifiestamente incoherente y supone un lastre.

Debemos ser conscientes de que el problema de la violencia y la desigualdad de género es un problema incrustado en las raíces de la sociedad, y por tanto, el marco jurídico y las medidas de carácter legal que puedan tomarse, sin dejar de ser imprescindibles, no pueden más que servir de complemento a una concienciación profunda de la comunidad en general. Es necesario potenciar la educación, el debate y la pedagogía en este sentido (mujeres y hombres) y, sobre todo, es imprescindible el ejercicio individual de cada uno de nosotros (hombres) para ser conscientes de una verdad irrefutable: vivimos en una sociedad machista, y demasiado a menudo nosotros ayudamos a alimentarla.

Por mi parte, comprendo que soy machista, me arrepiento y prometo luchar.

La dieta del contexto y los 10 segundos

En la sabana del razonamiento humano, los prejuicios son un temible depredador. Su dieta se compone principalmente de los contextos, que pacen plácidamente, neutrales, ajenos.

pantera_negra_27

Los prejuicios se alimentan del contexto, devorándolo. Cuanto menos queda del contexto, más engorda el prejuicio y más espacio ocupa en la sabana.

Cuando el contexto es aniquilado, eliminamos todo aquello que no pueda ser recogido en un titular, en una frase, en 10 segundos. Es  entonces cuando nuestra estepa queda yerma, y los contextos, aunque nunca dejan de existir, emigran hacia otros lugares.

Los prejuicios no son depredadores comunes, no mueren, ni siguen ningún ciclo vital, permanecen, son inmortales, pero dejan campos estériles a su paso, paisajes secos, abrasados, sin vida. Siempre alerta ante ingenuos contextos que puedan aparecer.

Como suele decir el filósofo Santiago Alba Rico «Vivimos en la cultura de los 10 segundos, las noticias se emiten en 10 segundos, se leen en 10 segundos, las decisiones se toman en 10 segundos y es muy difícil, por lo tanto, desmontar discursos –y los comportamientos concomitantes– en tiempos tan rápidos. En 10 segundos es más fácil destruir que conservar el mundo».

En el mundo de los 10 segundos no existe el razonamiento pausado, tan solo existe el titular. La gente necesita formarse una opinión sobre algo, y rápidamente la mente echa mano de aquello que resulta más evidente, aquello que de forma directa o subliminal se incrusta en nuestro cerebro, aquello que supone una opinión general o más repetidamente difundida. La mente coge el camino más corto.

Es entonces cuando los atajos se materializan en axiomas. Es al final del atajo donde el Islam es lo mismo que terrorismo fundamentalista y los países del sur son todos unos vagos.

Tal vez con algo más de tiempo para pensar, un debate más amplio, un razonamiento más sosegado, el contexto encontraría espacio. En el mundo donde el tiempo es el bien más escaso, donde la educación y la información son negocios, el contexto sobra, el prejuicio engorda y la pradera languidece y muere.

En el mundo de los 10 segundos, los medios de comunicación son la doctrina. La educación es especialización, moldea mentes para funcionar automáticamente. En el mundo de los 10 segundos estudiar filosofía es de gilipollas.

You Tube: Hans Rosling «necesitas algo más que los medios para comprender el mundo»